viernes, 27 de enero de 2017

EL CAPATAZ

 
Cargar kilos es una cuestión científica, porque se basa en hechos medibles. Sortear las dificultades de cada calle es una cuestión de responsabilidad, de saber lo serio que es el trabajo que se asume. Conocer a cada persona que sirve bajo una parihuela es una labor propia de un padre que conoce a sus hijos/hijas y los cuida en todo momento, buscando siempre lo mejor para ellos. Crear ARTE es un don de aquellos que verdaderamente se emocionan con lo que hacen y así lo transmiten a quienes tienen la dicha de encontrarse en el lugar debido y en el momento adecuado.

 
Guardo hacia él una amistad de cuna andujareña, compartida con mi familia, que siente esa misma ligazón a la persona de maese Bernabé Cantudo Duro, mi hermano de Cofradías.
 
Cuando converso con Berna mi imaginación vuela del pasado al presente, atisbando ese futuro que me gustaría que pudiera disfrutar mi hijo Manuel. Es la seguridad en las ideas, el ritmo sosegado de las palabras, cuidadosamente elegidas, porque él sabe que es muy importante cuanto se dice. Yo creo que hay futuro en este mundo cofrade gracias a personas como Bernabé.


A los auténticos capataces, quienes han servido junto a ellos bajo una trabajadera o un varal siempre los definen de la misma manera y, prácticamente, con las mismas palabras. ¡Eso hace que sea muy fácil reconocerlos!
 
Estamos ante un cofrade que asumió una labor y que la realizó con toda la dedicación que le es debida.

 
No soy amigo de tertulias, me gustan más los diálogos. Pude entrevistar a Bernabé para uno de mis programas radiofónicos "De escuadras a tramos" y aquella conversación mostraba a las claras un concepto sobre lo que signifca esta forma de creer que hemos recibido de nuestros mayores.

 
Ser una persona cabal consiste en ser una persona consecuente; ser una persona cercana consiste en saber acercarse a las personas, en formar parte de ese rincón de sus vidas que los une al disfrutar de unas mismas emociones y dar respuesta en el momento adecuado a cada necesidad, expresada o no por esas personas que se ponen bajo tu cuidado.

 
Ser capataz surge junto a hecho demostrable de ser una persona organizada, de buena memoria, de buen oído, de palabra justa en el momento en el que debe ser pronunciada.

 
Ser transmisor de emociones es un don con el que se nace. No está en el tono de voz ni en las frases pronunciadas. Ser portavoz de una forma de sentir implica NECESARIAMENTE, SENTIRLA AL IGUAL QUE LO HACE TU CUADRILLA.

 
Ser hermano mayor es un servicio a tu cofradía extremadamente delicado, donde la FE y el conocimiento del sentido y del sentir de cada corporación son los instrumentos precisos para que ese ministerio desarrollado durante cada mandato llegue al puerto debido.
 
La amistad de maese Bernabé Cantudo Duro es uno de esos dones que agradezco al Señor de la Sentencia y a mi Madre Santísima del Buen Remedio cada vez que tengo ocasión de mirar a sus ojos, mientras mi familia y yo dejamos un beso sobre sus benditas manos.
 
 

martes, 24 de enero de 2017

ANDÚJAR EN SUS GLORIAS


Es normal que los paisanos de Andújar tengamos en nuestra cabecera esos libros, esas guías para el caminante que marcan itinerarios de nuestra memoria a través de una Andújar, en su mayor parte, ya desaparecida.
 
Hay dos de estos libros de investigación acerca de nuestra historia documental y gráfica a los que guardo una especial admiración. Se trata del inefable "Ermitas, capillas y oratorios de Andújar y su término", de don Jesús Ángel Palomino León, editado por el Instituto de Estudios Giennenses en 2003, y el suculento "Monumentalidad religiosa de Andújar en la Modernidad", de don José Domínguez Cubero, publicado por el Ayuntamiento de Andújar en 1985.
 
Estos libros acompañan mis andares, mis cuitas y mis anhelos, al igual que los de muchos de los hijos e hijas de esta Ciudad.
 
Y junto a estos libros, he de citar mi reconocimiento hacia la labor desarrollada por la Asociación de "Amigos de la historia de Andújar" y, en especial, por esta recuperación de una parte importante de nuestro patrimonio y de nuestra memoria que están llevando a cabo.
 
 
 
A impulsos de su actividad, y tras llevar a cabo la restauración de un buen número de obras de arte contenidas en las iglesias de San Miguel y Santa María, esta Asociación ha creado una hornacina para albergar la advocación de Nuestra Señora de Consolación en el Altozano de la Virgen María, recuperando así esta devoción popular que existió en la Puera del Sol andujareña.
 
Para ello, solicitaron a la artista doña Ascensión Bracero Almagro, ceramista y alfarera andujareña, la recreación de una Imagen de Nuestra Señora bajo esta piadosa advocación, para lo que la maestra buscó inspiración en la iconografía de la Santísima Virgen de Consolación tal y como la representa la Orden Agustina en el momento de entregar la correa que ciñe el hábito de esta Orden a su creador, San Agustín, y a Santa Mónica.


 
Podemos apreciar la escena de manera completa en esta estampación conservada en la Parroquia de Santa María Magdalena, de Jaén, como parte del patrimonio conservado del antiguo convento agustino de Santa Úrsula, anexionado en nuestros días a la parroquia giennense. 
 
 
Nuestra Señora de Consolación, del monasterio de San Agustín, de Málaga, en sus cultos y durante la procesión claustral que realiza en su iglesia, acompañada por la Cofradía Malagueña de Amor y Caridad.
 
 
 
 
 
Distintas interpretaciones de esta iconografía de Nuestra Señora de Consolación -o de la Correa- son las que podemos encontrar, tanto en materia pictórica, obras en bulto redondo, de talla completa, e imaginería de vestir, a lo largo y ancho de esta biblioteca digital que es la Red.
 
Un gozo contar con esta advocación a la que rezaron nuestros mayores recuperada para Andújar y, de manera especial, para la feligresía de San Miguel Arcángel.
 
 
Una parroquia con un rico legado devocional que se van recuperando y manifestando a la contemplación de sus fieles y al deleite de los viajeros.
 
Así ha ocurrido con Nuestra Señora del Rosario de Fátima, que ya se encuentra en el interior del templo.
 

 
 
Y así ha de ocurrir en breve con la recuperación, por parte de la Cofradía del Gran Poder, de la advocación de Nuestra Señora del Socorro, que tuviera capilla en el convento-colegio de la Compañía de Jesús, para pasar posteriormente a la ermita de San Lázaro y recalar, finalmente, en la parroquia de San Miguel, donde recuperará, en muy breve plazo de tiempo, su lugar de veneración entre los hijos e hijas de Andújar bajo el amparo y cuidado de sus cofrades, que han logrado recuperar esta devoción andujareña hacia la Madre de Dios bajo esta advocación, tan ligada a la Compañía de Jesús y a la Orden Benedictina.
 
 
Nuestra Señora del Amparo, venerada en su capilla propia del monasterio de San Martiño Pinario, en Santiago de Compostela.
 
 
Lienzo de Nuestra Señora del Socorro, expuesto en el monasterio de San Martiño Pinario, en Santiago de Compostela.  
 
Junto a Nuestra Señora del Socorro, la Parroquia de San Miguel Arcángel, contó con una capilla dedicada a Nuestra Señora del Rosario, además de nombrarse la capilla de Ánimas de este templo como aquella en la que se veneraba la Imagen de María Santísima Nuestra Señora. 
 
Mantiene, pues, su pulso vital el sentir Mariano en la parroquia andujareña gracias al celo y a la fe de su comunidad parroquial y de su Cofradía del Gran Poder.
 
 
 
Gracias a nuestros investigadores, perdura en nosotros el recuerdo de que Nuestra Señora del Antigua también fue venerada en una de las puertas de Andújar, en la del Peso de la harina en concreto, y de que el postigo de la Puerta Nueva llevó el nombre de "Arco de Belén". Son estas devociones que quizás muy pronto también vuelvan a lugares muy próximos a los emplazamientos donde se le rezó a la Madre de Dios, solicitando su amparo y su protección.
 
 
Nuestra Señora de la Paz, según la fotografía conservada en la Fototeca de la Universidad de Sevilla. Advocación mariana que tuvo capilla propia en la iglesia de San Bartolomé Apóstol, al igual que lo hicieron Nuestra Señora de la Concepción y Nuestra Señora de la Asunción. 
 
La parroquia del Arrabal Mayor, con aquella frontera que supuso el Mestanza en su antiguo curso, también fue lugar de veneración hacia la Reina de Cielos y Tierra, de manera especial en la devoción a las advocaciones que celebran algunos de sus Dogmas más preclaros y defendidos por el pueblo español, como podemos ver.
 
 
Hoy día, sigue guardando un acrecentado fervor hacia Nuestra Señora bajo sus advocaciones letíficas de Nuestra Señora del Carmen, Nuestra Señora de la Concepción y la Santísima Virgen Madre de Dios.
 
 
 
 
La Virgen del Carmen es testigo del día a día de su pueblo y de manera especial, del devenir de su viejo Barrio del Carmen, ahora desde la capilla del Cristo de la Agonía, anexa a la iglesia de Santa María la Mayor. Dulcísimo el bendito Simulacro de la Madre de Dios y magníficas igualmente las muestras de otras advocaciones tan queridas también por nuestros mayores, como es el caso de la Inmaculada Concepción de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, devoción que tuvo obra piadosa en el colegio de San José y del que se conservan fotografías de las Hijas de la Caridad junto a las alumnas de este recordado colegio.
 
 
Santa María, Reina y Emperatriz de Cielos y Tierra, permanece también encumbrada en la capilla del Cristo de la Agonía a la espera de una necesaria y urgente restauración que logre recuperar su esplendor perdido.
 
 
La parroquia de la Divina Pastora muestra especial amor y filial seguimiento de las adovaciones de la Inmaculada Concepción de la Medalla Milagrosa, de Nuestra Señora del Pilar y de la Divina Pastora de las Almas, con ese sentimiento tan dulce que supone peregrinar hasta el bello y blanco lugar sagrado que ocupa el final de la Corredera de Capuchinos.
 
 
 
 
Confines orientales de la ciudad donde encontramos dos magníficas devociones: una, nacida al amparo de la oración de las Reverendas Madres Trinitarias del Convento de la Inmaculada Concepción de Nuestra Señora, y la otra, gracias a la fe y al tesón de un grupo de cofrades andujareños que supo hacer realidad un sueño consagrado a la Santísima Virgen del Carmen en el barrio de La Lagunilla, y que se ha convertido en un referente para la formación de otros Grupos cofrades que pudieran dar vida a Cofradías letíficas dedicadas a Nuestra Señora en las parroquias de Cristo Rey y de San Eufrasio. 
 

martes, 3 de enero de 2017

¡LA PRIMERA EN LA CALLE!

La Sagrada Familia, junto al Niño Jesús que sostiene en sus brazos San Antonio de Padua, entre los pequeños ángeles que le acompañan (obra tanto el divino infante como los querubes del maestro Luis Aldehuela) situados en el año 2009 en el presbiterio de San Bartolomé por el entonces párroco, don Juan Francisco Ortiz González.
 
La Sagrada Familia, ocupando el centro del presbiterio de San Bartolomé, de Andújar durante la Navidad de este año del Señor de 2016, entronizada sobre el dosel de cultos de la Cofradía de la Santa vera-Cruz, junto a sus jarras de azucenas y tulipas, ocupando el Divino Infante la peana de Nuestra Señora de la Amargura, de la Cofradía de los Estudiantes, entre los faroles de escolta de su cruz y piezas de su candelería y custodiado el conjunto por los juegos de ciriales de las Cofradías del Santo Sepulcro y de Nuestra Señora de la Victoria en su Soledad. Todo ello debido a la labor del actual párroco de San Bartolomé y Cristo Rey, don Manuel Jesús Quesada Rus.
 
Conservo un recuerdo, casi como si de un sueño se tratara, de haber contemplado una fotografía del grupo escultórico de la Sagrada Familia que se venera en la parroquia andujareña de San Bartolomé, sobre su paso procesional, recorriendo una calle de Andújar. Pero ya os digo que es sólo un sueño recurrente,... algo que aseguraría pude ver...
 
Detalle del escudo de Andújar en el reverso de una de las banderas de la Cofradía de San José, expuesta en pabellón tras el presbiterio parroquial.
 
Mientras, me deleito con este retablo navideño alzado en el presbiterio de mi parroquia cofradiera de San Bartolomé Apóstol, gracias a la labor de nuestro párroco, don Manuel Jesús y la colaboración de las cuatro cofradías que vivimos nuestra fe en la Parroquia del Arrabal Mayor iliturgitano y no dejo de anhelar la pronta salida del Santo Patriarca, contemplado en su iconografía de San José de la Montaña, coronado por presea imperial tal y como se venera en su Santuario de Barcelona, en el cual viven su vida consagrada las Reverendas Madres de Desamparados y San José de la Montaña.
 
Ya estamos en las vísperas de esta primera salida procesional en la ciudad de Andújar, precedidos por esos gozos y sombras que configuran los Siete Domingos de San José, que podremos revivir junto a esta ejemplar Comunidad Religiosa que consagra su ministerio cristiano en el servicio a nuestros mayores y a los más pequeños privados de la protección de la familia.
 
¡Benditas sean las Madres y todos estos cofrades que han hecho que las raíces a esta bellísima devoción Josefina se afiancen en la inestable tierra andujareña!
 
¡ID A JOSÉ!
 
Imagen venerada de San José de la Montaña en un retablo del lado del Evangelio de la Iglesia de San Juan de Dios, de Andújar, "Casa-Residencia de Mayores" regentado por las MM de Desamparados y San José de la Montaña, en Andújar (Jaén).
 
Imagen venerada de San José de la Montaña que se encuentra en el Oratorio de la Casa antes citada.
 
Imagen venerada de San José de la Montaña situada en el recibidor de la Casa antes mencionada.
 
San  José de la Montaña en la capilla de la "Colegio de Educación Infantil San Rafael y San José de la Montaña", que las MM de Desamparados tienen en Andújar (Jaén).
 
Imagen venerada de San José de la Montaña que procesiona cada festividad del Santo Patriarca desde el Colegio de San Rafael, de Andújar (Jaén).