viernes, 26 de octubre de 2018

BAEZA Y SU JURAMENTO A LA LIMPIA, PURA E INMACULADA CONCEPCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA, MADRE DE DIOS


¡Es ese amor que dejan en nosotros nuestros padres al brindarnos la vida el que retoma toda su fuerza ante la belleza de la vida disfrutada en Cofradía!

¡Y así es la Fe de Baeza, ese modelo que mantiene mi alma en permanente conquista!

Mi pasión por la Baeza cofrade comenzó en 1995, viendo caminar a MARÍA SANTÍSIMA EN SUS SIETE DOLORES Y TRAPASO hacia la Catedral que conmemora su Natividad.

Anunciaban el paso de su Cruz de guía un grupo de pequeños cofrades tañendo campanillas. Veintitrés años después, quizá haya sido uno de esos niños hecho ya un hombre quien me hiciera entrega de la fotografía-recordatorio en el momento en el que pude dejar mi ofrenda de fervor sobre la lígnea piel de LA MADRE FERVOROSA BAEZANA. ¡No me extrañaría!


¡La ciudad de Baeza es el reino que la belleza guarda para si! Y por ella la cuidan valientes gavilanes que graban su historia a golpe de Fe, esfuerzo y defensa de un legado recibido y asumido con sublime elegancia y total entrega.

Mi caminar por sus calles comenzó, en la mañana del pasado sábado 20 de octubre, frente al recoleto convento de Clarisas de San Antonio de Padua, donde se guarda y venera este bellísimo tesoro que es la bendita VIRGEN DE LA CABEZA, preciosa vicaria de los sentires peregrinos de la Muy Noble, Muy Leal, Antigua e Inmaculista Ciudad de Baeza, que rememora el sagrado Cerro que la Virgen eligió como su morada en la Sierra de Andújar.

Mi vida se hizo almíbar rezando la "Salve" ante su linda cara (¡menuda, pura y sonriente!) y al poder besar su mano. 

En esta visita, tuve el honor de coincidir con maese Alejandro Mora Raya, que compartía también su oración ante la MADRE junto a toda su familia.




El colegio de San Ignacio es un remedo de las escuelas de la Gloria, donde los niños hebreos que acompañan al Divino Maestro cruzando las puertas de esta "Jerusalén baezana", reciben clase de AMOR de Nuestra Sublime ESPERANZA Y CARIDAD, vestida de blanca paz, de infinita dulzura y de divina Pureza.

Allí recé, junto a los cofrades de su hermandad y los fieles devotos de la INMACULADA CONCEPCIÓN DE LA MEDALLA MILAGROSA, la oración del "Ángelus", lo que me infundió nuevas esperanzas para esta Iglesia de Cristo de la que todos los cristianos somos responsables.

Una pequeña ayudaba a su hermano a besar la mano de nuestra Madre celestial. ¡Esta niña oficia ya como sublime guardesa y acompañante del crecimiento en la Fe de su hermano!






En San Pablo nos aguardaba otro maravilloso tornavoz para los Gozos y las Glorias de Nuestra MADRE INMACULADA.

Nada más cruzar el dintel de su portada,  nos recibía NUESTRA SEÑORA DE LA QUINTA ANGUSTIA con un exorno que nos anunciaba ya este Noviembre de los Santos y las Ánimas benditas hacia el que caminamos. 


Recuerdo nuestra presencia (cuando aún radicaba su cofradía en el convento de San Antonio de Padua) en la bendición del SANTÍSIMO CRISTO DESCENDIDO DE LA CRUZ, sacra Imagen que realizara el iliturgitano maese Manuel López Pérez. Este imaginero gubió igualmente a NUESTRA SEÑORA en el momento de recibir el cuerpo sin vida de CRISTO al pie de la Cruz. Desconozco el actual paradero de ambas Imágenes devocionales. 

Ahora es la rotunda y magna obra de maese Dubé Herdugo la que recibe y colma las oraciones de la feligresía baezana.



NUESTRA SEÑORA DE LA AMARGURA, Madre Nuestra del Amor Hermoso que colma de lágrimas la memoria de las abuelas y de catequesis plástica la ancestral Ceremonia de "El PASO" en LA MAÑANA DE JESÚS en Baeza, recibía los atentos cuidados del pregonero para la Semana Santa de la ciudad en el año del Señor de 2019, Don Rafael Claramunt Manjón, quien resultó ser un solícito y enamorado servidor de la MADRE que DIOS nos concedió.



Y alli nos aguardaba, junto a CRISTO EXPIRANTE, NUESTRA MADRE Y SEÑORA DE LA MERCED Y PIEDAD, Reina concebida sin mancha de Pecado Original y dictada por el propio DIOS, como en un sueño, al pulso cabal y elegante de maese Antonio Parras Ruiz, "luthier" del más bello poema de amor que el hombre haya soñado para honrar la benignidad y majestad de su MADRE bien amada.


LA SANTÍSIMA VIRGEN DEL CARMEN recibía la muestra de Fe en la que nos educaron nuestros mayores, teniendo junto a Ella la Imagen de NUESTRA SEÑORA DE LA MERCED, también contemplada en su clásica iconografía de Madre que abraza al Divino Infante.

Las huellas de lo que somos están reflejadas en cada bella Imagen devocional que puebla nuestras iglesias y nunca hemos de renunciar a Ellas. No hemos de olvidar rezar un "Ave María" ante los benditos simulacros de la MADRE DE DIOS, sean de la época que sea. Algo que siempre observamos a nuestras madres y abuelas. ¡Echo en falta este detalle de detenerse a rezar ante la Imagen de la MADRE entre algunos de los miembros de las generaciones que nos suceden!



NUESTRA SEÑORA DE LAS ANGUSTIAS resumía en su Iconografía el principio, el nudo y el anuncio del sublime desenlace del Misterio de nuestra Salvación. 

¡Qué pena no haber podido besar directamente su mano! 

El artista cuando recibe el don de DIOS de crear Belleza, sueña igualmente con que esa piadosa obra sea reconocida y avalada con el "Cum laude" de la huella que deja la devoción de sus fieles a través del ritual del besamano y del besapié. Las policromías están hechas para ser consumidas por el amor, la devoción y el tiempo.


SOLEDAD DE MARÍA encumbrada entre un maravilloso universo de obras pictóricas que nos recuerdan el sacro Dogma que, hace ahora cuatrocientos años, la Universidad de Baeza tomó como santo y seña para todos sus bachilleres, graduados y doctores. 

¡Y maese Juan López Jiménez, vestidor de canon exquisito, ensalzó a la REINA DE BAEZA con galas antiguas, conventuales, propias de un lienzo dieciochesco o de cualquier grabado del siglo XIX.

¡Enhorabuena por el rompimiento de Gloria que nos mostraste acariciando el rostro de la REINA CARMELITA, maese Juan!

El hecho de alzar ese retablo efímero de besamano frente al propio retablo de NUESTRA MADRE nos privó de la profundidad que habría supuesto que ELLA nos recibiera ante el presbiterio de la capilla conventual, ofreciéndonos una visión completa de ese sueño de cera y flor que al quedar frente a su retablo permanente resultaba falto de posibilidad de apreciar del conjunto a mi modesto entender.







¡Santa Cruz, sagrado altar de Dios, santo Camino el del Vía Crucis que conduce a Cristo, abrazado al Leño. salvador desde el que llena las almas de esperanza y perdón!

La secular iglesia de la Santa Cruz fue un rotundo alegato de la medida adecuada, de la comuniœn entre estilos, del poder de la música, la luz de cera, el incienso y LA VERDAD RECIBIDA.

Para un Veracrucero como quien os habla, poder besar la mano de la MADRE DE DIOS Y NUESTRA ante la reliquia de la SANTA CRUZ desde la que CRISTO nos la ofrece como MODELO, EJEMPLO Y GUÍA es una manera de sentir que todas las cosas están donde tienen que estar, que todo ocurre como ha de ocurrir, que le debemos mucho a nuestros mayores y que hemos de enseñarles muchímo aún a nuestros hijos e hijas.

¡Un absoluto deleite rezar bajo la bóveda del decano templo baezano! ¡Ni el propio Bach encontraría lugar de inspiración más fértil!





¡En la Santa Iglesia Catedral de la NATIVIDAD DE NUESTRA SEÑORA (¡en una de cuyas cúpulas se proclama el nombre de "Almansa"!) todo era PUREZA Y PAZ ABSOLUTA!


¡No acierto a imaginar lo que hubieran pensado los artífices de tan maravilloso templo si hubieran podido disfrutar de las magnas celebraciones y cultos que en él siguen teniendo lugar bajo estas bóvedas y entre estos preclaros muros! 

¡Qué prodigiosa emoción la sentida al cruzar la Puerta de Luna y dar de bruces con toda la nobleza baezana recogida en ramos de flor, en cera prendida, en brocadas sedas y en encaje que rozaba la PUREZA de la simpar VIRGEN Y MADRE, MARÍA INMACULADA, REINA Y SEÑORA DE LA PAZ.








Quiero traer a vuestra memoria aquel tiempo en el que, tras cruzar la gran portada de septentrión de la NATIVIDAD DE NUESTRA SEÑORA, nos recibía la infinita MISERICORDIA DEL SEÑOR DE LAS ESCUELAS en aquella somera capilla.

La piel curtida de oraciones de CRISTO CRUCIFICADO me vio ir creciendo a sus plantas, a la sombra protectora del "Padre nuestro" que ante ÉL imploraba solicitando una vida plena para los míos.

Ahora, ya en la iglesia universitaria de Baeza, DIOS mismo ha alzado su cátedra construida sobre los sillares nobles y bien tallados que son las almas de sus cofrades de la Hermandad de las Escuelas.

Y si la FE tiene por cauce el Catecismo secular de CRISTO contemplado en su DIVINA MISERICORDIA, su nave para llegar a todos los rincones de Baeza es un hito más de las manos de mi querido maestro José Carlos Rubio Valverde. Y la vela, PURÍSIMA E INMACULADA EN SU TRAZA, es esta MADRE DOLOROSA Y CONFORTADORA a un tiempo,inspirada por DIOS a las sabias gubias de maese Israel Cornejo.




Todo en la joven y secular Cofradía es unción sagrada, todo es buen gusto, todo es excelencia, sencilla y perfectamente forjada FE EN CRISTO Y MARÍA!

Tuve el honor, durante mi visita, de poder conversar por unos instantes con su hermano mayor para mostrarle mi admiración y mis parabienes ante toda la labor desarrollada por la hermandad de las Escuelas baezana. Y he de destacar el excelente trato recibido de este caballero, cofrade amante de su FE y de su CIUDAD.

¡MAGNÍFICO CAUDAL EL QUE ACOMPAÑA AL SANTÍSIMO CRISTO DE LA MISERICORDIA Y A NUESTRA MADRE Y SEÑORA CONTEMPLADA EN SU PURA, LIMPIA E INMACULADA CONCEPCIÓN!

¡No hay ni un solo detalle en esta hermandad que no conecte con mi alma, mis conceptos y mi manera de entender una COFRADÍA! ¡Divina CRUZ DE CRISTO la que se alza sobre el pecho de estos cofrades!






EL SALVADOR de Baeza esta construido, la mitad sobre medida cantería y la otra sobre aire purísimo de aquellos cerros altivos y heroicos. ¡EL SALVADOR de Baeza es lo más parecido que conozco a la antesala de la Gloria!


¡Al cruzar su cancel, ¡nuestra MADRE DEL ROCÍO!, Quien venía recibirnos, dejando su hornacina a la dulcísima INMACULADA que corona el retablo del lado de la espístola de su bellísima sede canónica.

Con un beso sobre la seda de aquella cinta, mi pensamiento hizo camino y pude rezar una SALVE que desde el corazón de Baeza, voló hasta el Santuario de la Marisma.




¡SALUD, AMARGURA, ESPERANZA... Y LÁGRIMAS de una Virgen española, elegantísima y torera por los cuatro costados de su esencia!

¡Tan bonita la VIRGEN NIÑA de Baeza! ¡Tan sabia su mirada, tan tersa esa piel juvenil, tan profunda la huella de sus lágrimas! ¡Y ese palio penitente hecho techo de Gloria rociera para la Dama Baezana de las Lágrimas de cristal y perlas!



¡PAZ Y DOLORES! Al contemplar tan exquisito equilibrio, sentí el deseo de repetir las palabras que fueron pronunciadas por Pedro en el instante que refleja el lienzo sobre el ático del retablo presidido por la HUMILDAD DE CRISTO: ¡Qué bien se está aquí, Señor! ¡Por qué no alzamos una tienda y disfrutamos eternamente de este instante!



NUESTRA MADRE Y SEÑORA CONTEMPLADA EN LOS MISTERIOSOS DOLOROSOS DE SU SANTO ROSARIO lucía esa delicada matemática que sólo los mejores vestidores saben ejecutar con el encaje, la seda, la blonda y el "chantilly" entre sus manos. ¡UNA TESIS DOCTORAL, LA MAESTRÍA MOSTRADA POR MAESE JUAN LOPEZ JIMÉNEZ, para enmarcar LA BELLEZA DOLOROSA DE LA MADRE HUMILDE DE BAEZA!

¡Y qué maravilloso diálogo entre sus tonalidades guardaba la SEÑORA con su reflejo en el lienzo que coronaba aquel retablo de la nave de la epístola!




IGLESIA CONVENTUAL DE LA ENCARNACIÓN DEL VERBO EN LAS ENTRAÑAS PURÍSIMAS DE MARÍA SANTÍSIMA.

No conocía esta capilla. Nunca había tenido la oportunidad de contemplarla abierta. ¡Os podéis imaginar, pues, la sorpresa, la maravilla y el pasmo al encontrarte ante tan maravilloso lugar sagrado!

Esta VIRGEN DE LOS DOLORES con alma cordobesa, nacida del sobrio gusto del maestro "Turili". DOLORES lo colmaba todo. ¡Parecía haber sido soñada para dar LUZ y VIDA a aquella barroca catequesis hecha retablo!

Y la luz, la flor, la FE y la cercanía del cuerpo siempre vivo de CRISTO mantenían la ilusión de los cofrades que custodiaban aquel simil de la Gloria que la Hermandad del Santo Entierro había alzado.

¡Una delicia más en un día cubierto de incienso, música, de flor y de amor hacia la MADRE!





¡TRINIDAD de los Descalzos! ¡TRINIDAD de tez morena! ¡TRINIDAD de las hechuras elegantes con su saya de amor bordado! ¡TRINIDAD del Agnus Dei! ¡TRINIDAD del llanto hecho flor sobre el tocado! ¡TRINIDAD, HIJA DEL PADRE, ESPOSA DEL ESPÍRITU Y MADRE DE CRISTO CAUTIVO, CRUCIFICADO Y GLORIOSAMENTE RESUCITADO!




Tuve el honor de besar la cinta con nuestros colores nacionales que una dama baezana me ofrecía. Orgulloso de mi origen, orgulloso de mi nación, orgulloso del ritual vivido, aquella SALVE tuvo tintes guadalquivireños que recordaron mi estancia en aquellas nobles tierras de Aragón y lo que aprendí en sus aulas de pupilos y compañeros.

PILAR de la FE, esta tierra nuestra MARIANA que tiene que mantener claro su origen y defenderlo, tal y como lo hace la buena gente de Baeza.


¡Un ALCÁZAR para la BELLEZA! ¡Alzada al pie de su sublime retablo, la devoción a la MADRE DE DIOS, elegante, repleta de siglos, ejemplar y bella, se me mostraba como faro preciso para musitar una SALVE por el eterno descanso en la Gloria bien merecida de todas las almas que han partido al encuentro de DIOS PADRE.


¡MI FERVOSORA! Mi primera Madre en Baeza, a quien recé mis primeras oraciones y con quien comprendo los prodigios y dones de aquella tierra. 

Estrenando dosel de cultos, realizado por maese Antonio Villar, la hermana mayor de mi pequeña DOLORES iliturgitana dirigió mi plegaria hacia CRISTO ATADO A LA COLUMNA y me infundió FE, ESPERANZA y CONFIANZA.

- "¡DIOS PROVEERÁ!", me dijo, nada más arrodillarme a sus plantas




A los seguidores más asiduos de este blog y de su cauce en la comunidad homónima de "Facebook" no he de recordaros mi admiración hacia la obra, las formas y la elegancia de maese Antonio Parras Ruiz.

Un beso en las manos de LA SANTÍSIMA VIRGEN DEL ROSARIO que guarda y cuida Baeza entera, me transportó a lo largo y ancho de esa sagrada geografía que el maestro ha plagado con el bello rostro de la Santísima Virgen, con la mirada de joven nazarena que inspira una FE hecha de juncia, maestranzo y letanía lauretana.




¡PURA Y LIMPIA DESDE EL PRIMER INSTANTE DE SU CONCEPCIÓN!

¡TODO EL ORBE EN GENERAL,
A VOCES, REINA ESCOGIDA,
DIGA QUE SOIS CONCEBIDA
SIN PECADO ORIGINAL!

Y yo, ante aquella capilla de la INMACULADA CONCEPCIÓN DE MARÍA DE LAS BENDITAS ÁNIMAS, no puedo dejar de elevar mi SALVE PASTOREÑA ante el maravilloso lienzo que aquella capilla conserva.




MI CRISTO DE LA CAÍDA se acercó a su MADRE Y REINA DE LA ESPERANZA para enjugar su llanto! ¡Estoy seguro que fueron testigos del hecho todos los jóvenes vestidos de servidores de librea que asistieron a la MADRE Y SEÑORA durante aquella jornada portentosa, pues en su mirada se adivina el reconfortante calor que mana del AMOR MATERNAL recibido al rozar tan sólo su manto 


¡La luz de la capilla agustina de Santa María Magdalena era anuncio del maravilloso tiempo de vísperas que nos acerca al 8 de Diciembre, esa fecha en que nuestra tierra germina y florece como si de nuevo fuera el fértil Mayo!




Llegada las primeras horas de la tarde, y tras hacer un receso para disfrutar de la bonanza del saber vivir baezano que se goza en los establecimientos abiertos en sus portales, llegaba el momento de visitar los oratorios familiares que cobijan  el DOLOR de NUESTRA MADRE Y SEÑORA revestido por esa fe que no conoce fronteras y donde nos espera la LUZ y la SALUD que tanto nos hace falta.

Fue así que, al igual que en los viejos oratorios palaciegos, las familias reservaban un lugar para DIOS, maese Pedro Cánovas nos abría las puertas de su hogar para que nuestra oración encontrara su norte junto a CRISTO presentado al pueblo, vestido de púrpura, y que LUZ PURÍSIMA DE LA ESTRELLA DEL OLIVAR nos inundara a todos.

Maese Pedro, ¡ETERNAMENTE GRACIAS por todos esos pequeños sacrificios que han propiciado este gozo de poder besar la mano de la más PURA ESTRELLA!


En ese caminar por las calles de Baeza, mis pasos me condujeron de vuelta ante mi Virgen de la Cabeza en el Ejido, donde adiviné esos corrillos de chiquillos "jugando la bandera", como nos rememorase en su sublime Pregón maese Alejandro Mora. ¡Qué mejor espacio para dulcificar el alma de un hijo de Andújar!

Allí, en un barrio muy parecido al que yo me crié, la gentileza de maese Juan Antonio Cruz nos ofrece ese espejo, esa puerta, ese arca, ese trono, esa fuenta de SALUD que mana de la BELLEZA, la PUREZA y la VERDAD de la MADRE DE DIOS, interpretada para Baeza por maese Antonio Parras como REINA DEL ROSARIO, DE LA MERCED Y LA PIEDAD, COMO REINA SUBLIME COMO MADRE DE SALUD y COMO VIRGEN DEL DULCE NOMBRE. ¿Le cabe mayor Letanía a la producción artística de un imaginero?

Mil gracias, Pedro y Juan Antonio, por brindarnos la posibilidad de hablar, cara a cara, con el modelo de vida que es LA MADRE DE DIOS y por hacernos participar de su BELLEZA al visitar vuestros hogares.




¡Me resta el Santuario de la Yedra y NUESTRA SEÑORA DEL ROSEL como próxima meta para futuras visitas!

¡Así discurrió esta jornada histórica, memorable y cordialísima de un día de Otoño en la MUY NOBLE, MUY LEAL, ANTIGUA E INMACULISTA CIUDAD DE BAEZA, nido fecundo de buenos cofrades!

A la Agrupación Arciprestal de Cofradías, a las Cofradías de la ciudad, a las piadosas Asociaciones de Fieles, a las Bandas de Cornetas y Tambores y a la Agrupación Musical, a sus gentes, a sus maneras os doy las gracias por brindar esta jornada para HONRAR A DIOS a partir de la veneración de LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA, CONCEBIDA INMACULADA DE TODA MANCHA DE PECADO ORIGINAL.

LAVS DEO, VIRGINIQVE MATRI