La primera imagen que voy a incluir en este entrada es un viejo barro cocido, una de las auténticas leyendas devocionales iliturgitanas. Est era el mejor indicativo de que la Casa Hermandad de la Cofradía Matriz debía tener su sede en la calle Vendederas:
Y, si estamos hablando de leyendas cofradieras de nuestra tierra, que mejor que traer a esta entrada el más perfecto tapiz que existe en la ciudad sobre nuestra ancestral Fiesta Romera, esta personalísima obra del Maestro Don Pedro Palenciano Ruiz:
El Camino hay que seguirlo, hay que hacerlo entre amigos, hay que sentir su significado, hay de disfrutarlo, hay que saber llevarlo bien condimentado, hay que respetarlo, hay que rezarlo y hay que entenderlo.... por eso este azulejo es el más perfecto diálogo entre el peregrino y el propio Camino Viejo:
Y, si estamos hablando de leyendas cofradieras de nuestra tierra, que mejor que traer a esta entrada el más perfecto tapiz que existe en la ciudad sobre nuestra ancestral Fiesta Romera, esta personalísima obra del Maestro Don Pedro Palenciano Ruiz:
El Camino hay que seguirlo, hay que hacerlo entre amigos, hay que sentir su significado, hay de disfrutarlo, hay que saber llevarlo bien condimentado, hay que respetarlo, hay que rezarlo y hay que entenderlo.... por eso este azulejo es el más perfecto diálogo entre el peregrino y el propio Camino Viejo:
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