Tomado del ritual de la Liturgia Hispano-mozárabe
El velo de templo se rasgó en una tarde deicida; Mas, ahora, pasada la Pascua y tras la venida del Espíritu protector, vuelve a envolver, con rizada caricia, tan sagrada Vida cosechada en santidad.
La Pureza vuelve a nosotros; Aquello que es sagrado: la bondad, la santidad, la belleza, son las virtudes que hemos de perseguir.
¡No somos santos, pero hemos de aspirar a alcanzar esa Verdad por la que Cristo quiso quedarse entre nosotros, naciendo de mujer, haciéndose Hombre, dejándonos el Evangelio escrito con sus actos y entregándonos su vida como signo de entrega absoluta!
¡No somos santos, pero hemos de aspirar a alcanzar esa Verdad por la que Cristo quiso quedarse entre nosotros, naciendo de mujer, haciéndose Hombre, dejándonos el Evangelio escrito con sus actos y entregándonos su vida como signo de entrega absoluta!
En su honor, y para hacernos uno con Él, la Muy Antigua, Pontificia, Ilustre y Venerable Cofradía de la Santa Vera-Cruz, de Andújar, alzó su retablo sacramental en la calle de San Francisco, cerca de la memoria de nuestra perdida capilla -en el desaparecido convento de Santa Ana-, siendo recibidos en la casa de la familia Barba Lobatón, quien tan amablemente nos permite cada año utilizar aquella fachada que firmara el maestro Anibal González como elemento sustentante para nuestro altar.
El retablo estuvo presidido por la venerable Imagen del Santísimo Nombre de Jesús, revestido con túnica de brocado, ceñida por cíngulo áureo, rematado en dos borlas del siglo XVIII, y potenciado con tres ráfagas mostrando flores de lis, conteniendo el Divino Infante en sus manos las espigas y la Cruz victoriosa.
Se alzaba el Santo Nombre de Jesús sobre la flamante peana estrenada en este año 2016, estando escoltado por seis hachas de cera blanca, fundidas sobre seis candeleros de orfebrería plateada realizados en los talleres de Orfebrería "Sanlúcar" y junto a dos jarras portando azucenas, todo ello realizado en orfebrería en el taller sevillano de Álvaro Fernández, sucesor de maese Juan Fernández.
Tras el Divino Infante quedaba manifestado el SINELABE CONCEPTA de la Hermandad, en alusión a la Pureza Inmaculada de la Santísima Virgen María, primera custodia que contuvo en su vientre virginal la Divina Humanidad del Hijo de Dios.
Nuestro SINELABE muestra bordados en oro del siglo XVIII pasados a nuevo terciopelo para orlar la salutación a la Pureza de toda mancha de Pecado Original con la que Dios preservó, desde el primer instante de su Concepción, a la Santísima Virgen María. El pasado a nuevo paño de los bordados lo realizó, con total perfección, la bordadora cordobesa Mercedes Castro, siguiendo el diseño del orfebre Antonio Cuadrado.
La vara que lo sustenta porta un orbe que contiene la reliquia de sangre de San Pío IX, pontífice al que le fue revelado el Dogma de la Inmaculada Concepción por el Espíritu de Dios. Rematan la pieza las iniciales de la leyenda castellana: "Sin Pecado Original".
La balconada de aires hispanoamericanos con la que el maestro Anibal González dotó a la "Casa Espejo" andujareña sirvió de hornacina para manifestar la barroca Imagen de San Francisco de Asís, que volvía, un año más, a ser exaltado por esta Seráfica Cofradía junto a la memoria de su convento.
A los pies del Divino Infante quedó expuesto un relicario conteniendo el Trigrama del Nombre de Jesús, y que está realizado por el orfebre cordobés, maese Manuel Valera.
En atención a la sangre derramada por Cristo durante su cruel flagelación, la Cofradía de la Santa Vera-Cruz portó como insignia mayor en su representación corporativa el guión de Nuestro Padre Jesús atado a la Columna, que muestra el lienzo del siglo XVIII con la efigie del Señor contenida en un relicario que recuerda una orla dibujada en uno de los libros de cabildos conservados por la Cofradía.
Esta orla se muestra sobre terciopelo rojo, adornado por bordados del siglo XVIII y estrellas de la misma centuria que formaron parte del antiguo gallardete del Señor de la Columna, egregio Titular de nuestra secular Corporación Penitente.
Remataba su vara un viejo cordón metálico del siglo XVIII con el que fueron atadas alrededor de la columna las manos de Cristo, en su iconografía anterior a la Guerra de 1936.
La vara terminaba en una Cruz iluminada por los colores de la Orden Dominica en atención a la relación mantenida entre la Orden de Predicadores y la de los Frailes Menores.
Dos hachetas de cera roja rendían veneración a esta Insignia.
Un año más, la custodia procesional comenzó su tránsito por las calles andujareñas conteniendo al Santísimo Sacramento,
La Comunidad Parroquial de Santa María rodeó al Sagrado Cuerpo de Cristo siguiendo fielmente el viejo rito, tal y como nos lo enseñaron nuestros mayores.
Dios se hizo uno con su pueblo.
Fotografía: Luis Pedro Pérez García
Fotografía: Facebook de la Cofradía de la Misericordia,
Providencia y Esperanza
Y en las calles, un año más, las Cofradías y los vecinos, fieles a un amor incondicional, vistieron de gala fachadas y espacios por los que Cristo habría de pasar para estar más cerca de todos y cada uno de sus hijos.
Misericordia, Providencia y Esperanza se hizo retablo sagrado, bajo bambalinas, cobijando a la Madre de Dios del Rosario de Fátima.
El Altozano de la Virgen María manifestó por primera vez a Nuestra Señora de Consolación ante el paso de la custodia sacramental.
Se echa en falta que antes de realizar este retablo, que nos recuerda la presencia de la Virgen bajo esta advocación contenida en una hornacina sobre el vano de la Puerta del Sol andujareña, se hubiera hablado con los cofrades para solicitar sus ideas.
¡Tantas sugerencias se podían haber hecho! Como la posibilidad de que hubieran sido manos de imagineros las que recuperasen esta advocación, quizá "de candelero" para que vestidores andujareños la engalanaran según el tiempo litúrgico, pudiendo ser trasladada a la Parroquia de San Miguel para celebrar su fiesta y que hubiera sido Ella quien presidiera un retablo para saludar al Santísimo a su paso por su Altozano.
¡Qué interesante hubiera sido preguntar a los cofrades!
¡Ojalá pronto pueda volver a alzar su retablo sacramental en este Altozano de la Virgen María la Cofradía del Santo Sepulcro, como nos tenía acostumbrados! ¡Bellísimas posibilidades las que les otorga este lugar a la Venerable Cofradía!
La Cofradía de la Inmaculada Concepción convirtió en celeste dosel las oraciones de las Reverendas Madres Contemplativas Trinitarias para custodiar a la Pura y Limpia Concepción de María, Madre de Dios.
¡Sigue viva esa bellísima tradición de crear alfombras de serrín coloreado para saludar el paso de Su Divina Majestad! Hay que felicitar y animar a los componentes de la Adoración Nocturna y cristianos comprometidos de la feligresía de San Miguel, tanto como a los hermanos de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, "el Señor de los señores", por seguir eleborando tan maravillosas alfombras iluminadas con infinito gusto.
¡GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS EN NOMBRE DE TODOS LOS CRISTIANOS DE ANDÚJAR, QUERIDOS AMIGOS Y HERMANOS!
Fotografías: Facebook de "Radio Andújar"
Fotografías: Facebook de "Radio Andújar"
Situada a las puertas de la Ermita, la Cofradía de la Virgen de la Cabeza manifestó, bajo pabellón regio, un bellísimo ostensorio de orfebrería, cobijado entre la cera blanca y la flor que rodeaban a Nuestra Patrona a través de una antigua fotografía.
Fotografías: Facebook de "Radio Andújar"
La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno mostraba en su retablo -emplazado este año en la Plaza de la Autonomía- una de aquellas cruces llegadas a las parroquias con motivo de la Santa Misión, ésta en concreto ofrecida el 19 de marzo de 1948 por los Padres Redentoristas.
¡Fue un placer ver recuperada esta interesante Cruz!... ¡y todos pensamos lo mismo!
Fotografía: Facebook de Carmen Cruz Mondéjar
Como antes os decía -y de todo corazón- ¡gracias hermanos y hermanas Nazarenos por conservar esta bellísima costumbre, esta elegante ciencia, este saludo a Dios que se hace arte efímero sobre el pavimento! ¡Enhorabuena por vuestro tesón!
Volvió también María Santísima de la Amargura, custodiada por San Miguel y San Rafael, a llenar con su Luz y su Pureza la Calle de la Alhóndiga, a la que sus vecinos y vecinas siguen llenando de vida, de prestancia, dando testimonio de su ser.
Se van notando las ausencias, que se vuelven soledades en los hogares, huecos en las paredes y espacios vacíos sobre la cal.
Gracias, por tanto, a quienes mantienen viva esta fe, animando desde aquí a los más jóvenes para que tomen el relevo de nuestros mayores.
Fotografías: Facebook de "Radio Andújar"
Fotografía: Facebook de la Cofradía de la Paz,
Paciencia y Rosario
Una Cruz que es Luz, espigas y blanca cera, y dos angelitos que aguardan a Cristo junto al Sagrario fueron, un año más, el retablo perfecto sobre las paredes de la Calle Principe, tal y como cada año lo sueñan los cofrades que le dan vida: ¡sus hermanos de la Paciencia!
Ojalá que durante la celebración del Corpus Christi en el próximo año 2017 podamos disfrutar, una vez más, de los retablos sacramentales alzados por las Cofradías del Santo Sepulcro, el Buen Remedio, la Soledad y la Agonía en el Huerto, pues eran magníficas creaciones que contenían tanta belleza ante el discurrir de Su Divina Majestad sobre la custodia manierista.
¡No es ciudad Andújar para mantener altares alzados en su centro ciudadano durante la noche de vísperas del Corpus! Es mejor no tomar ese camino,... ¡hacedme caso!
Tampoco tendría mucho sentido pedir que permanecieran expuestos estos retablos horas depués del paso de Cristo Sacramentado ante ellos. Las personas que los instalan también tienen familia y quieren gozar de su compañía durante esta jornada festiva. ¡Y no hay que olvidar que todo retablo alzado tiene sus vísperas de montaje y su periodo de desmontaje intenso!
Yo pienso que, en nuestra Andújar, la mejor opción sigue siendo contemplar estos retablos y esta decoración de nuestras calles desde bien temprano gozando de ellos a primera hora, cuando el Sol aún no ha alcanzado su cénit, disfrutad de ese ambiente aún fresco, ver a una ciudad que despierta vestida de fiesta.
Fotografías: Jesús Jiménez Cortijos
Fotografía: "Colegio Inmaculada Concepción -La Salle"
Hay muchos que, si las cosas no salen como ellos piensan, deciden tirar la toalla. ¡Pues es una auténtica pena!, porque hay mucho por hacer de la manera en la que siempre se ha hecho: Pedid y se os dará. Unas veces más, otras menos,... ¡pero nunca perder el sabio don del intercambio, la pícara sabiduría del lance, el noble equilibrio del "hoy hasta aquí, mañana, hasta allá, luego,... ¡ya vamos viendo!"
Ante todo y sobre todo, que el único fin perseguido sea
PARA MAYOR GLORIA DE DÍOS Y LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
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