miércoles, 7 de diciembre de 2011

TU PUREZA NAZARENA


Anochecida del día de la Constitución en casa de mis vecinas, las Madres Trinitarias contemplativas, que, en su Convento de la Purísima, rezaban a María Santísima en compañía de una noble feligresía participante fiel durante este Novenario de la Liturgia Eucarística dedicada a honrar a Dios, junto a la veneración de su más perfecta creación: la Mujer concebida pura y limpia desde su primer instante.

Aqui, en Andújar, como queriendo hacer un brindis a este Dios creador de la Belleza, contamos con un sublime simulacro de esta perfecta creación.


Retornada del estudio de restauración de José Luis Ojeada a su templo a tiempo para presidir su Novenario, La Pura y Limpia Concepción de Nuestra Señora mostró una limpia policromía, que marcaba sus mejillas, nariz y barbilla. El estofado de saya y manto se mostraban libres de suciedad y con sus partes perdidas consolidadas y recuperadas en sus tonalidades de origen.


El proceso de recuperación ha incidido, de una manera especial, en la nube de querubes que rodean la luna sobre la que se alza la Madre de Dios, cuyo pie aplasta la cabeza de una serpiente que ha quedado en una tonalidad más oscura. Es un auténtico placer recuperar la policromía de estos angelitos y la blancura de una luna, claridad perdida desde hace tiempo.


Tras el rezo de Vísperas y del Santo Rosario, la asamblea, con la bendita compañía de la comunidad de Religiosas Trinitarias, alzó, un año más, su oración a Dios en uno de los espacios más sagrados conservados en Andújar.

Es un gozo contar con la proximidad de dos de los lienzos más bellos de los que contamos en la ciudad: esta representación de La Trinidad, acompañada por la Sagrada Familia en Nazaret y su bendita parentela "Trianera", es un cuadro que bien merece dedicarle una entrada aparte en nuestro blog.


En este convento donde nació la Hermandad del Buen Remedio, tiene asiento este perfecto Nazareno, encumbrado junto al coro alto del cenobio trinitario. La iconografía de Cristo Nazareno junto a las murallas de Jerusalén que tan extendida resultó y que en la localidad granadina de Moclín alcanzó altas cotas de veneración, ilustra en nuestro convento de la Purísima una de las representaciones más piadosas de este pasaje cofradiero por excelencia.


Desde la marcha de la Cofradía de Buen Remedio a la capilla del antiguo hospital, la imagen de Simón de Rojas, religioso Trinitario defensor a ultranza de la figura de la Virgen María, vino a ocupar las peanas del altar erigido para ser ocupado por los Titulares de la Hermandad de la Sentencia.

S. S. Juan Pablo II, en la clausura del Año Mariano de 1988, declaraba la santidad de Simón de Rojas, algo que nuestra comunidad Trinitaria nos venía recordando desde la centuria del XVII. 

5 comentarios:

  1. Fantástico, Manuel, el hecho de que aproveches la festividad de María Inmaculada para recordar a propios y extraños las bellezas que atesora el convento de Trinitarias.

    ResponderEliminar
  2. Preciosa exaltación a María Inmaculada amigo manuel, y además nos has enseñado otras cosas. Enhorabuena. Sine Labe Concepta. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea. http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  3. Gracias por vuestros comentarios, amigos míos.

    Manuel, ¿te imaginas una nueva Exposición del conjunto de Imágenes del Niño Jesús que atesora este cenobio de la Purísima Concepción?

    Me haría ilusión que mi Manuel pudiera disfrutar de ellos. Ya durante uno de los días de la Novena a la Concebida, mi pequeño infante se aferró a los barrotes de la reja del coro bajo conventual y se quedó mirando absorto al interior, no sé si más sorprendido por las madres que rezaban o por el hieratismo de la "Priora". ¡Qué ganas de poder fotografiarla un día de estos!

    Bien, a los que desconozcáis el detalle, comentaros que preside a la comunidad de Madres Contemplativas Trinitarias en el coro bajo de su convento de Andújar, una pequeña Imagen de la Virgen María, tallada durante la Centuria del XVIII, revestida con el hábito de la Orden.

    ResponderEliminar
  4. Manuel, no te olvides del San Antonio pintado por Manuel Aldehuela, otra joya del templo, que le sirvió a Luis de inspiración para su talla de San Bartolomé. Un abrazo de Fran.

    ResponderEliminar
  5. Hola Fran. Cierto, una más de las delicadezas que guardan nuestras Madres Trinitarias. Creo que es un ¿óleo sobre tabla?... que reproduce, con total acierto la perdida talla del Santo Franciscano con el Divino Infante en sus brazos que fuera venerado en el Convento de Señor San Francisco de nuestra ciudad, en la frontera entre arrabales. La talla la podemos ver fotografiada en la obra de José Domínguez Cubero: "Monumentalidad religiosa de Andújar en la modernidad".

    Maese Luis supo recuperar esta iconografía y vestira de la dulzura heradada del magisterio de su padre.

    Conventos de Andújar que encierran la memoria de una época de mecenas y maravillosas creaciones, llenas de simbolismo.

    Me alegro de tenerte por aquí, amigo mío.

    ResponderEliminar