Le sigue guardando. Está pendiente de él. Continúa velando su sueño. No hay montaje fotográfico que iguale esta realidad. Allí, en el rincón donde el tiempo se pliega y se riza como la cola de la túnica de ruan nazarena, el sueño se hace presagio de días de Gloria.
Amigo Manuel, es lo más bonito que he visto en mucho tiempo, y lo digo de todo corazón, me he emocionado. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea. http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
ResponderEliminarCon mi Manuel pude dar gracias a Dios por la vida en todos y cada uno de los rincones donde Él me ha respondido siempre...
ResponderEliminarLo mejor es que, al año siguiente, pudimos repetir una singladura similar llevando al hijo de nuestros hermanos de Camino, Luis y Susana.
Y es que Dios y su Madre siempre están donde nos dijeron nuestros padres que siempre nos esperarían.
Gracias por vuestra visita, amigos míos.
Querido Manolo, hoy hemos estado en misa en Santo Domingo de Guzmán, escenario cofrade malagueño donde los haya, y me he acordado de ti. Un abrazo fuerte de
ResponderEliminarFran
Buenas tardes, Fran. A raiz de tu mensaje, he visitado las Cofradías que radican en la malagueña Parroquia de Santo Domingo y tienes toda la razón: es un auténtico muestrario del sentimiento cofradiero; uno de esos rincones donde la fe y el arte siguen dialogando, pase lo que pase en la calle.
ResponderEliminarMe alegro de tenerte por aquí. A ver si nos vemos pronto, amigo mío.