Ya que andamos por el centro ciudadano, nos detenemos, si os parece, en la forma en que resuelve este debate de los chaflanes el edificio que recibe a nuestro Cabildo Municipal. Aquí tenemos el chaflán oriental, con la calle San Miguel.
Y aquí nos encontramos con el que ve venir a las cofradías que recorren las angosturas de la calle Postigos, buscando el poniente de esa luna del Parasceve que sirve como principal luminaria para las Cofradías que recorren esta serpenteante vía. Tampoco debe perderse este tránsito de Cofradía; lo que estoy seguro que veremos con el tiempo será itinerios distintos para tiempos de Penitencia o de Gloria. Lo esencial es que no pierda su ser cofrade este barrio antiguo con tan hermoso callejero como es el de la Parroquia de San Miguel.
Hablamos de chaflanes bien pensados y aquí tenemos la piedra molinaza buscando la esquina entre Postigos y calle La Feria. En el momento de la fotografia, en esa mañana de domingo, repicaba a misa la campana de Santa María.
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